Era una tarde invernal, clara y vibrante de luz...así empezarían los versos si estas imágenes fuesen poesía. El atardecer caía sobre las calles de la ciudad y el tiempo por un momento se detuvo.
El sol de tarde despedía el día que -aunque frío- brindó su luz en su máximo esplendor. La tarde se ponía en una Barcelona urbana y vacía donde hileras de coches dibujaban una silueta infinita con destino hacia el ocaso.
En este look tan invernal como atípico, el blanco se convierte en el protagonista absoluto de esta tarde de Marzo para elevar con su sobriedad un clásico que nunca pasa de moda: el abrigo tres cuartos.
Tanto este como los pantalones palazzo son de lana de cashmere y con su fluidez en formas muestran como, una vez más, los cásicos nunca mueren y hay piezas básicas que siempre funcionan.
Dentro de este ocaso la paleta de tonos tierra destaca sobre el blanco mediante un jersey de cashmere y el bolso Alma de Louis Vuitton que, asimismo, es otro clásico fundamental que nunca me cansaré de usar.
Cierra el look la boina en los mismos tonos que el abrigo y los pantalones, aportando ese aire afrancesado y urbanita que da calidez hasta a la tarde más gélida.
Abrigo: Armani
Jersey: Lacoste
Pantalones: Purificación García
Stilettos: Manolo Blahnik
Bolso: "Alma" Louis Vuitton
Boina: Sombreroshop
Wow! Un look espectacular y un post precioso. toda la razón: los básicos y clásicos nunca mueren. 💕